viernes, 30 de noviembre de 2012

Primer amor. Iván Turgueniev


   

     "Entonces, la reina oye los discursos, escucha la música, pero no mira a ninguno de los invitados. Seis ventanas están abiertas de par en par, desde el techo hasta el suelo, a través de las cuales se ve un cielo oscuro cubierto de estrellas refulgentes y el jardín con árboles grandes. La reina mira al jardín."

     Muchas veces he abordado el tema de los clásicos que nos dan miedo. Por su procedencia, por su voluminosidad... las razones pueden ser muchas. Por eso se agradece encontrarnos con libros que nos den una muestra de lo que nos podemos encontrar al adentrarnos en determinado tipo de literatura. Un ejemplo de esto es el libro que he decidido traer hoy a mi estantería virtual. Un libro de apenas 150 páginas que bien nos sirve para iniciarnos con esa asignatura pendiente para muchos que es la literatura rusa. Hoy traigo a mi estantería virtual, Primer amor.

    En este libro asistimos a una cena, en ella el anfitrión reta a sus invitados a relatar su primer amor y así nos da pie a conocer tres historias. Dos son historias livianas, un amor a los seis años cándido como corresponde y otro que dice que su único y primer amor ha sido su esposa. Así que nos centramos en el tercero, un amor tormentoso, tanto, que su protagonista pide tiempo para ir haciendo anotaciones de sus recuerdos antes de relatar su historia. Así conocemos la historia de Voldemar y Zinaída, una joven hija de una princesa arruinada rodeada de los pretendientes que corresponden a su status y belleza.

     No deja de ser curioso encontrarnos con un autor ruso tan conciso del que dicen ser, el ruso mas europeo. Asistimos al amor de una joven frívola de aspecto delicado y el protagonista y, a la vez narrador de la historia. La joven se enamora del padre del chico y establece así un triángulo cargado de relaciones cruzadas y conciencias a ratos tormentosas y a ratos acalladas por sus protagonistas.

     Tal vez lo mejor del libro sea la sensación que tenemos de estar leyendo algo actual. No por usos y costumbres descritos, ni por cánones de belleza y reglas de comportamiento, sino por sentimientos. Los sentimientos que nos plasma Turgueniev son atemporales, el amor que entra con virulencia y el desencanto del descubrimiento, la indecisión, la vergüenza, el secreto.. todo ello hacen de este relato un testimonio personal relacionado mil veces con la vida del propio autor.  En este librito, el amor se muestra como un sentimiento revelador que marca la vida de sus protagonistas, atando a Voldemar a unas reglas de conducta que le llegan a marcar con un deje de amargura... hasta que el destino le da una segunda oportunidad de ver a este su primer amor. Y nos encontramos pensando en qué joven podría resistir semejante tentación para luego ver las consecuencias que puede tener el caer en ella.

     Como decía al comienzo, muchas veces hay autores que nos "da miedo" descubrir. Hace apenas unos días @yossibarzilai apuntaba a una conversación sobre James Joyce y Ulises en la que comentábamos que se trata de un título que muchas veces nos acobarda pero que, una vez leído, pocas personas arremeten contra él. Por eso me he decidido con este libro conciso que habla de miradas hacia atrás en la propia vida y reflexiones sobre conductas pasadas y uno de los sentimientos más tratados en la literatura, el amor, el enardecimiento del enamorado... y sus consecuencias.

     Hoy, y puesto que el tema es un tanto más íntimo, no voy a hacer de anfitriona que decide preguntar a sus invitados por su primer amor esperando que cuenten sus historias, soy consciente de que es algo imposible que lo hagáis. Lo que si me gustaría saber es si ese amor, perdura en vuestra memoria, al menos a ratos, no digo el primero cronológicamente, sino el primero de verdad.

     Gracias
   

   

jueves, 29 de noviembre de 2012

La catedral del mar. Ildefonso Falcones




     "La ciudad se extendía a sus pies.
     - Mira Arnau- le dijo Bernat al niño, que dormía plácidamente pegado a su pecho-, Barcelona. Allí seremos libres.
     Desde su huída con Arnau, Bernat no había dejado de pensar en aquella ciudad, la gran esperanza de todos los siervos."
   
     Hoy traigo un libro de esos que explotaron en éxito y ventas y que muchos han olvidado. Estos son los títulos que nos hacen pensar en si los Best Seller son realmente historias fáciles o libros de calidad y cuantos de ellos pasarán realmente a la historia de la literatura. Hoy traigo a mi estantería virtual, La catedral del mar.

     En pleno siglo XIV los habitantes de un barrio de pescadores de Barcelona, deciden construir el mayor templo mariano conocido: Santa María del Mar. Es durante su construcción que crece Arnau, hijo de un siervo que abandonó sus tierras por los abusos de su señor feudal. Su vida, su ascenso, su amor... todo a la sombra de la Catedral, su Catedral, es lo que descubriremos en esta historia.

     Falcones desembarcó en las librerías a lo grande. Con esta obra, la primera, apareció en grandes cantidades demostrando una fuerte apuesta de la editorial por la historia que tenía que contarnos. Una historia de Barcelona en el siglo XIV que no podemos evitar comparar con Los pilares de la tierra, como se viene haciendo desde que comenzó su andadura literaria allá por 2.006. Tengo que decir, que hecha la lectura es lógico que se establezcan comparaciones, sin embargo no nos vamos a encontrar con una especie de réplica a la española de la conocida historia.
     Con un comienzo bastante brusco nos vamos introduciendo en la historia y las costumbres imperantes en la España medieval. Una novela histórica construida con un ritmo ágil y que pocas veces se para en muchos detalles para evitar así ralentizar la historia. En eso sabe bien como manejarse el autor, una historia que transcurre a lo largo de tantos años, la vida de Arnau, da para mucho. Y hay que saber hacerlo con agilidad para no aburrir al lector. Y así lo hace Ildefonso recreando todo tipo de peripecias en las que acompañaremos al protagonista que no siempre lo va a tener fácil. Aunque mucho peor lo tiene el género femenino, causante a su vez de grandes problemas. Y así se va enredando la novela poco a poco mientras busca enredar al lector que, a estas alturas ya sabe que hay buenos muy buenos y malos malísimos. Como corresponde a este tipo de títulos.

     Es, en definitiva, una novela histórica muy entretenida de la que se recogen costumbres y algunas leyes y en la que se van mezclando historias que harán que las horas desaparezcan delante de sus páginas. Tal vez abuse un poco del término "novelón" en el sentido más romántico de la palabra, pero mantiene el ritmo e interés igualmente. Si aún no os habéis animado, os recomiendo la historia de Arnau. Espero que os suene... aunque tiene unos pocos años ya; porque... ¿también os pasa que se os olvidan los títulos de los "últimos Bestseller" una vez que pasan unos cuantos meses?

     Gracias

   PD. Os dejo el link a un SORTEO INTERNACIONAL activo en Facebook:

miércoles, 28 de noviembre de 2012

2001 Una odisea espacial. Arthur C. Clarke




     "La sequía había durado ya diez millones de años y el reinado de los terribles saurios tiempo ha que había terminado. Aquí en el ecuador, en el continente que había de ser conocido un día como África, la batalla por la existencia había alcanzado un nuevo clímax de ferocidad, no avistándose aún al victorioso. En este terreno baldío y disecado sólo podía medrar, o aún esperar sobrevivir, lo pequeño, lo raudo o lo feroz."

     Muchas veces he hablado de la compleja relación entre cine y literatura. La relación entre ambos es más que notable y siempre se discute sobre si la versión cinematográfica está o no a  la altura de la novela. Una vez le pregunté a un autor que me comentó que lo difícil para el director era imaginar el mundo exactamente igual que lo había imaginado el creador, en cada detalle, pero que por lo demás no le veía problema para ser, mínimo, igual que la obra escrita. Hoy traigo a mi estantería virtual una obra concebida en sentido contrario que ha pasado a la historia del cine y también de la literatura de ciencia ficción. Hoy traigo, 2.001. Una odisea espacial.

     ¿Y si la influencia extraterrestre es la que provoca el salto en la inteligencia del mono determinando su evolución? Es una gran pregunta para comenzar una historia y así lo hace la nuestra. Después vivimos un salto en el tiempo en el que el hombre investiga la luna y, finalmente, entramos en la historia de Poole y Bowman, dos doctores que viajan a bordo del Discovery hacia Saturno junto con tres tripulantes dormidos y un sexto acompañante: la computadora que hace que todo esté en orden, HAL9000. Aunque siempre puede haber fallos en un ordenador...

     Esta vez, la concepción de la historia es un poco diferente a la habitual. Kubrick se puso en contacto con Clarke que colaboraría con él en el guión de 2001: Una odisea en el espacio. A partir de varios cuentos del autor y apoyada principalmente en "El centinela", de 1949. La versión cinematográfica se estrenaría en el año 1.968 y aproximadamente un año más tarde vería la luz la novela que creció de forma paralela a la película. Hoy podría decirse que es un clásico moderno, ya que se ha convertido rápidamente en una novela de culto imprescindible para los amantes del género y primera de una saga de novelas en las que según el propio autor, más que darnos secuelas lineales puras, lo que hace es mostrarnos variaciones sobre el mismo tema, afirmando incluso que cada una "tiene su propio universo". Serían 2010, 2061 y 3001.

     Lo realmente difícil en un libro de esta género es no quedar obsoleto, es decir, que nos presenten una serie de avances en un momento determinado y que al leerlos cuando ya no son invenciones de un autor porque podemos encontrar ejemplos reales similares, no tengamos la sensación de estar leyendo algo desfasado. Y en esta obra, el autor consigue que nos quedemos inmersos en la historia sin pararnos a pensar en que, realmente, no ha quedado tan atrás como debería para el tiempo que ha pasado. En este caso, Clarke ha utilizado uno de los grandes enigmas para el hombre y es el momento justo de la creación, cuando la inteligencia despierta, y desarrolla una teoría que nos atrae ya en los primeros minutos del libro. Ese paso en un instante que tiene algo de elegidos para evolucionar que tanto nos atrae desde siempre en la literatura y el cine.
     Una vez que nos tiene enganchados nos enfrenta a nuestras propias creaciones, el enfrentamiento ya clásico en la ciencia ficción entre el hombre, la razón, la capacidad de sentir y discernir, y la máquina, HAL, un ser sin conciencia que parece que la intenta alcanzar y no puede con ella. Es además una historia rápida y entretenida que engancha tanto a amantes del género como a aquellos que no suelen verse atraídos por este tipo de historias, ya que entre enigmas y luchas las páginas se nos pasan volando. Como todo buen libro de ciencia ficción empieza calentando motores, con calma, para sumergirnos en unas interesantes historias que nos tienen muy pendientes hasta llegar a un final redondo y sorprendente. Y, por supuesto, que nos da mucho sobre lo que hablar y especular.

     Como curiosidad comentar que, si bien se ha dicho muchas veces que IBM estuvo vinculado al proceso de creación de la historia y, de ahí que HAL sean las letras inmediatamente anteriores a las suyas en el abecedario. Todas las personas que participaron en el proyecto lo han negado tajantemente, explicando que HAL es el acrónimo de Heuristic Algorithmic Computer; es decir, un ordenador capaz de resolver problemas (algoritmos) basados en la heurística.

     Hasta aquí y muchísimo más da para hablar el título que traigo hoy, imprescindible tanto en su visión cinematográfica como en la escrita. Por su aportación al mundo de la ficción, y, sobre todo, por el magnifico rato de entretenimiento que disfrutamos sumergidos en la historia de un ordenador, un mono y un monolito. ¿O hay alguien que aún no conozca la famosa escena?, porque la  historia... si que la conocéis, ¿verdad?

     Gracias

martes, 27 de noviembre de 2012

La Rastreadora. Antonio Lagares




     "Su mirada transmitía la gravedad de la situación. Multitud de ojos se clavaron en la figura inmóvil que se apreciaba en la copa del árbol; ojos acusadores de una tragedia que ni él mismo llegaba a comprender. Trastornado por lo acontecido, testigo presencial de una muerte ajena, la rutina de aquel día desapareció en el balanceo de una cuerda con la muda protesta de un ser que ni siquiera pudo pedir socorro cuando advirtió que la muerte le acechaba."

     Hay autores que nos suenan de verlos en la televisión, en la red, en las librerías... Eso me pasa con el autor del que os hablo hoy, se trata de un nombre que no me es ajeno. Conociendo los juegos mentales habituales de su obra, me atraía la posibilidad de leer su última historia. Hoy traigo a mi estantería virtual, La Rastreadora.

     Conocemos a Miguel, un hombre cuya vida cambia ya desde niño al presenciar una muerte. Un hombre que lleva años torturándose con ella y su posible participación hasta el punto de marcar su desarrollo y su vida para siempre.

     Este es uno de esos libros con los que hay que tener cuidado en la sinopsis. Por eso ha sido más escueta que en otras ocasiones, para evitar por todos los medios entregar la solución al acertijo que nos propone el autor. La novela está construida como un thriller en el que no tenemos que buscar al asesino porque ya conocemos a todos los personajes. De hecho, la mayor parte de la novela es entre dos, Miguel y Elyran, su "rastreadora", la persona encargada de exponerle su vida y actos delante. A el y a un lector que asiste como testigo mudo a la situación que se va produciendo entre ambos, una atmósfera opresiva en la que Elyran, ni siquiera conociendo los más oscuros secretos de él, es capaz de hacerse con el dominio absoluto de la situación. Hay un pulso constante entre ambos, una lucha y, como resultado, un sometimiento.
  El autor va encajando las piezas de esta historia con parsimonia, eso no significa que sea una historia lenta, sino que vamos viendo acercarse la última pieza, esa que nos da la solución, y no somos capaces de colocarla hasta que llegamos casi al final. Y lo hace retumbando, nos obliga a volver la mirada hacia lo leído y verlo con unos ojos nuevos y plantearnos si, realmente... no, he dicho que no iba a contar más.

      Hoy traigo un libro en el que, fiel a su costumbre, el autor nos enseña mentes torturadas, esqueletos en el armario y secretos que, muchas veces, ni siquiera sabemos que estamos guardando. Nos presenta personajes que no buscan nuestra simpatía porque no es una historia de buenos y malos, sino de sombras que se llevan en el interior y que van saliendo poco a poco. Una historia directa, que tampoco busca embellecerse con bonitas palabras, sino que utiliza un vocabulario contundente y despojado de cualquier tipo de artificio.

     "No es un libro de terror" he leído al autor comentar, y coincido con él. Pero os diré una cosa: hay personas que da miedo que existan o que hayan existido, ¿verdad?

     Gracias

lunes, 26 de noviembre de 2012

EL viejo y el mar. Ernest Hemingway




     "Era un viejo que pescaba solo en un bote en la corriente del Golfo y hacía ochenta y cuatro días que no cogía un pez. En los primeros cuarenta días había tenido consigo a un muchacho. Pero después de cuarenta días sin haber pescado, los padres del muchacho le habían dicho que el viejo estaba definitiva y rematadamente salao lo cual era la peor forma de la mala suerte;  y por orden de sus padres, el muchacho había salido en otro bote, que cogió tres buenos peces la primera semana. Entristecía al muchacho ver al viejo regresar todos los días con su bote vacío, y siempre bajaba a ayudarle a cargar los rollos de sedal o el bichero y el arpón y la vela arrollada al mástil. La vela estaba remendada con sacos de harina y, arrollada, parecía una bandera en permanente derrota."

     Este fin de semana hablaba de prejuicios, unas veces razonados y otras no. Yo los tuve durante un tiempo con este libro. No me digáis el motivo... creo que fue porque me lo regalaron hace muchos años y la palabra "viejo" me sonó despectiva. De alguna forma trágica incluso. Y eso condenó al libro en su estante durante meses que se convirtieron en años. Hasta que, finalmente, me decidí a leer esta historia. Hoy traigo a mi estantería virtual, El viejo y el mar.

     Conocemos a Santiago, un anciano pescador que lleva ochenta y cuatro días sin pescar nada. De hecho ha perdido a su ayudante, pues su familia temía que estuviera con un patrón gafado. El día ochenta y cinco, sin embargo, se encontrará con la presa que le ha desvelado. Vivirá una lucha con este gran pez hasta ver si puede llevarlo a puerto o no.

     En realidad podría decirse que lo que hoy traigo es un cuento. Sólo que la palabra cuento se toma muchas veces de forma peyorativa, cuando realmente no es así. Así que diré que es un relato corto, para leer del tirón, escrito de una forma sencilla y sin pretensiones. A partir de aquí, una vez que vamos pensando en lo que hemos leído cerrado ya el libro, es el momento en que nos abrimos a su historia. Descubrimos un hombre en el ocaso de su vida que lucha, pensamos en todo lo que nos han dicho en apenas un puñado de palabras y comprendemos la belleza y emotividad del relato que hasta hace unos minutos tuvimos entre manos.

     Cierras el libro y no puedes evitar mirarte las manos, sabiendo que no eres Santiago, que no ha sido tu lucha aunque te hayas emocionado. Y miras el mar, la mar, con otros ojos. Por un momento con los ojos de un pescador capaz de enfrentarse a tiburones. Entrañable este Santiago que llevaré conmigo para siempre. Tal vez por venir de una tierra con tradición pesquera, o tal vez no haga falta ser de este tipo de tierras para apreciar al protagonista. Lo que es si que os puedo decir, es que la historia conmueve. No llega a ciento cincuenta páginas y la vivimos como propia con un ritmo pausado, adecuado a la edad. La soledad, la vejez, la fuerza de voluntad y la espera, sobre todo la espera. Antes de darme cuenta ya tenía el final encima, perfecto, cosa que pocas veces se puede decir en un libro. Acompañada por un narrador que es capaz de ceder su puesto al protagonista, he vivido la salida al mar, el hambre, la lucha con un pez, con varios, ¡tiburones! He olido la mar y escuchado gaviotas. Y lo primero que pensé al hacerlo, es que podía haberlo disfrutado mucho tiempo antes.

     Hoy traigo un libro conocido por todos, al menos en título. Un libro que, como suele suceder en estos casos, hizo correr ríos sobre el origen de su protagonista, diciendo si era tal o cual patrón del barco del autor. Parece que ahora se decantan por un hombre canario... pero sólo lo parece, siempre hay quien discuta teorías cuando el autor no puede confirmar ninguna. De lo que no cabe ninguna duda, es de que se trata de un título imprescindible en cualquier biblioteca.

     Y vosotros, ¿cuál es vuestro imprescindible, ese libro que si perdierais tendríais que volver a comprar?

     Gracias


sábado, 24 de noviembre de 2012

Prejuicios literarios


Torre de libros por Matej Kren


     Ayer comentaba con Offuscatio sobre libros y autores y si leemos de forma selectiva, autores de culto, conocidos, mediáticos... gustos en general. Una de esas conversaciones interesantes sobre literatura en las que coincidimos de vez en cuando y que tanto ponen sobre la mesa. Temas interesantes. Tras ella estuve echando un vistazo a los libros más vendidos y encontré básicamente eso, marketing en las listas de ventas. No marketing editorial, al menos en su totalidad, sino mediático por el motivo que sea.
     Me encontré con las conocidas sombras del tal Grey, un libro que ha llegado ahí por el respaldo mediático, esta sí, de su editorial. Tal vez en otros países haya sido por el boca a boca, pero aquí nos han barrido y nos han convencido de que, como ya he leído en algún sitio, estábamos ante el nuevo Harry Potter. Parece que la mujer ha descubierto América, porque el punto G ya se sabe donde esta y, sinceramente, no son los libros porno que decían antes de traducirlos. Tenemos al Premio Planeta, al finalista, a Reverte... y las sorpresas como la vida de Justin Bieber.

     Cuando leo la lista no puedo evitar arrugar la nariz ante determinados títulos. Tengo.... prejuicios, a cada cosa hay que llamarla por su nombre, a la hora de coger determinados títulos. Unas veces puede ser porque haya salido escaldada de anteriores experiencias con el autor, lo cual me parece bastante razonable. Sin embargo, también entramos en el terreno de lo poco razonable. Hay autores que me caen mal, y los he leído y disfrutado, pero resulta que me cuesta traerme un libro suyo a casa porque el pobre señor o señora no me cae bien...  y me cuesta darle una oportunidad. Además admito que es algo irracional, alguno de ellos incluso está muerto, pero he leído alguna cosa que hizo o dijo... y bueno, me cuestan. También puede intimidarme el nombre. Me pasa con Virginia Woolf. Mi primera experiencia con ella fue un desastre, repetía fragmentos en la lectura con la sensación de estar perdiéndome algo. Cuando terminé el libro la sensación era de haber leído una de cada dos líneas, y la mía no era la buena precisamente. A esta tengo que darle otra oportunidad con muchísima más calma. Bueno,a esta y a otros cuantos más con los que me ha sucedido, el último Las baladas del ajo. Y claro, luego están los libros que escribe Justin Bieber por poner un ejemplo. Ya no se donde colocarlos, directamente. Si cantas, cantas; si bailas, bailas; si trabajas en la tele. Porque trabajas en la tele... pero te pones a escribir también y dudo de si lo hacen porque son conocidos y pueden aprovecharse de ello para las ventas o si de realmente tienen talento. Y sí, ya se que los libros de Boris pueden ser entretenidos, y Maxim Huerta tiene éxito con su última novela.... pero no puedo evitar preguntarme si es realmente tan fácil. Y recelo una vez más antes de comprarlos.
     Es curioso, ¿verdad? Resulta que la gente que ya es famosa vende libros porque se hace una propaganda mediática tremenda, ellos mismos al salir en la televisión. Pero luego es mucho más fácil convencernos de que agotemos las ediciones del libro de una desconocida sólo porque nos dicen muchas veces que hay que leerlo. ¿Y qué pasa entonces con el autor que empieza pero que aún no ha explotado por tener éxito? Porque María Dueñas es muy famosa y ha vendido muchas copias, pero alguien tuvo que comprar el primer libro editado. Y hoy los medios ponen a nuestra disposición nombres de autores a los que ayer no llegaríamos. Y ellos son la mayor parte de las veces los que exponen sus libros como si de una mesa de novedades se tratase.

     Así que hoy no hablo de libros, sino de autores. De si nos influyen o no a la hora de comprar. Y no hablo de nuestros favoritos sino de prejuicios. Eso que hace que arruguemos la nariz cuando tenemos un libro delante. Esa forma de juzgar de la que no se salva nadie; porque no olvidemos que para muchos Tolstoi era un Tolstón por muy reconocido que esté. Thomas Mann un ladrillo, Coelho un demagogo...y así tantas "etiquetas" como nombres que perfectamente se pueden dar la vuelta por sus fans y contarnos que Tolstoi nos hablaba de relaciones humanas en sus novelones, que Mann es una maravilla literaria de ritmo constante y Coelho brilla por sus reflexiones. Además tenemos que tener en cuenta que las personas somos curiosas por naturaleza y , muchas veces, es esa curiosidad la que acaba por provocar que nos llevemos el libro a casa, disociando el autor del libro con el producto en sí. Por ejemplo no soportaba ver a Cela, pero sus obras me parecen una genialidad. Sea como fuere hoy tengo la curiosidad en vuestros ojos cuando estáis en la librería. ¿Os influye a la hora de comprar un libro el autor que lo ha escrito?, ¿tenéis.... prejuicios? y ya si queréis decirme con quien los tenéis...

     Gracias


viernes, 23 de noviembre de 2012

Los desorientados. Amin Maalouf




     "LLevo en el nombre a la humanidad naciente, pero pertenezco a una humanidad que se extingue, escribió Adam en su libreta dos días antes del drama.
     Nunca supe por qué me llamaron así mis padres. En mi tierra natal no era un nombre frecuente, ni nadie de mi familia se había llamado así antes que yo. Me acuerdo de que un día se lo pregunté a mi padre y se limitó a contestarme:!¡Es nuestro antepasado común!", como si yo pudiera no saberlo. Tenía diez años y me conformé con esa explicación. Quizá habría debido preguntarle mientras vivía si había tras esa elección alguna intención, algún sueño."

     Hay autores que tienen un peso y cuyos libros conocemos todos aunque solo sea de nombre. Hablar de Maalouf es vincularlo inmediatamente a León el Africano, y creo que es lo que hemos hecho todos hace unos días cuando hemos encontrado en las librerías pequeñas montañas de su último libro, que hoy traigo a mi estantería virtual. Hoy traigo, Los desorientados.

     Conocemos a Adam, un profesor de historia cuarentón que lleva años viviendo exiliado de su país natal, el Líbano. Recibe en un momento la llamada de la esposa de quien fue uno de sus amigos de juventud, allá por los años sesenta, para comunicarle que éste está muriendo. Adam decide en ese momento regresar para acompañar a su amigo y, aunque no pudo ser, le valdrá el viaje para reencontrarse con el resto de la pandilla y ver los cambios que se han producido en todos ellos.

     Esta novela nos cuenta en poco más de quinientas páginas la historia de una generación. Adam sale de su país enamorado de la pareja de un amigo suyo que fallecería en una explosión. Al regresar pasados más de veinte años recupera a esa mujer y la historia que la que fue su pandilla tiene que contarle. De este modo seremos testigos de las opciones de la población de una zona de Oriente que no ha ido evolucionando al mismo ritmo que Occidente. Sus preocupaciones, su vida diaria, nada tienen que ver con las nuestras. Vemos así a través de sus páginas al que prospera, al exiliado, el fallecido, también al integrista.. reflejándonos todas las posibilidades que puede tomar la población en el Líbano en estos últimos años. Con todo es un libro que trata de amistad, de amor y de traición, lo que hace que vayamos siguiendo una historia que bien podía ser la del propio autor. No olvidemos que, al igual que el protagonista, el autor se exilió en París y eso hace que nos preguntemos, como suele pasar en estos casos, cuanto trasfondo de su propia vida podemos encontrarnos entre sus páginas.

    Es un libro que toca todos los temas importantes, nos habla de pasión, religión, sociedad y cambios en las personas. Un libro escrito de forma sencilla y pensado para hacer reflexionar al lector sobre temas ya conocidos en otras obras de Maalouf. Y sin embargo, no alcanza la calidad literaria de otros títulos suyos. Tal vez por el perfil del protagonista o porque no terminé de encajar ese triángulo amoroso que me presentaba, me dio la sensación de que a este libro le faltaba un último empujón. Ese que hace que encaje a la perfección con un "click" en la mente del lector y nos lleva corriendo a buscar sus páginas.

     Un libro, en definitiva, que proporciona horas de entretenimiento mientras nos da muestra de sentimientos y maneras de actuar que nos quedan lejanas pero que, tengo la sensación, recibí con la expectativas demasiado altas.

     Y vosotros, ¿cuál ha sido el último libro que no ha alcanzado la cota que esperábais?

     Gracias

jueves, 22 de noviembre de 2012

Batman. VV.AA.














     "O mueres siendo un héroe o vives lo suficiente para convertirte en villano."

     Si hay un género que he traído poco al blog es el de los cómics. Vale sí, han pasado MAUS, Mafalda y Mortadelo y Filemón, pero nada más. No es que no lo considere literatura, no. De hecho parece demostrado que su origen se remonta a los códices anteriores a la edad media. Han pasado años... Y si nos acercan los periódicos quienes comenzaron a incluir este tipo de dibujos caricaturescos a veces, hasta aparecer con formato propio en el año 1897, a partir de ahí llegarían con relativa rapidez muchos de los personajes que hoy seguimos teniendo entre nosotros, como Superman, Batman, Tin Tin... y ya en los años sesenta vivirían su gran explosión con el desembarco de Marvel Comics de la mano de Stan Lee. Hoy traigo a mi estantería virtual a un superhéroe, hoy traigo a Batman.

     Cuando era niño Bruce Wayne asiste como testigo al asesinato de sus padres Thomas y Martha a la salida del teatro. Hoy es una suerte de playboy millonario, magnate industrial con una fortuna heredada y conocido por su altruismo. Sin embargo guarda su privacidad con celo y su gran secreto sólo es conocido por su mayordomo Alfred. A medida que Industrias Wayne crece también lo hace su mayor contribución al bienestar de la ciudad en la que reside, Gotham; y es que nadie sabe que Wayne, por las noches, lucha contra el crimen bajo el nombre de Batman.

     Batman nace en mayo de 1.939 en las páginas de Detective Cómics, un año después de que llegase a la tierra una nave de Kripton. Lo hizo de la mano de Bob Kame quien afirmó haberse inspirado en tres fuentes: la película La marca del Zorro de 1920, el ornitóptero de Leonardo Da Vinci, y la película The Bat Whispers de 1930. De estas tres fuentes tendríamos la batseñal, la doble identidad, las acrobacias, la capa de murciélago y la máscara. Lo que no se si tomó del alguna parte fue el carácter del personaje, ya que en todos estos años no recuerdo haber visto a Batman en actitud relajada, ni tampoco a su alter-ego sonreír. En un primer boceto Batman usaría mallas rojas, un antifaz y cuerdas. Las alas son rígidas y la cara iba cubierta por un antifaz. Este sería el dibujo del que parte Finger, y le pondría orejas, una capucha que le tapase un poco más la cara y una capa en lugar de las alas rígidas. Le ponemos botas, guantes, le coloreamos de gris el traje y... voilá, ya tenemos al Batman que conocemos hoy. ¿Y su alter-ego? Pues tomamos un poco del carácter y las victorias de Robert I (Robert el Bruce), un noble escocés con una conocida afición por las mujeres, y otro poco de Anthony Wayne... y ya tenemos a nuestro admirado Bruce Wayne.

     Lo cierto es que han pasado años y Batman ha sufrido sus altibajos. Lo hemos visto luchar contra mil y un enemigos, ha vivido épocas de grandes éxitos y también temporadas difíciles. A medida que se aproximaban los años cincuenta los superhéroes empezaron a flaquear. La bomba atómica, las guerras y finalmente la censura y la caza de brujas en USA hicieron mella. Se dijo que Batman y Robin eran homosexuales, exactamente igual que se atacó a otros superhéroes como Superman por minar la autoridad paterna. La editorial salió al paso desmintiéndolo y se empezaron a probar "experimentos" en un intento de hacer resurgir la historia. Finalmente se volvió al origen del personaje y la historia de Batman continúa hasta nuestros días, impulsada por el éxito cinematográfico.
     Muchos han sido los villanos a los que lo hemos visto enfrentarse, de los más normales a los más extravagantes, conocimos a el Joker, el Espantapájaros, Dos caras, el Pingüino, el Segador... la lista es interminable cuando uno vive en una ciudad poblada de criminales durante tantos años. Y lo que está claro, es que nos queda mucho Batman por descubrir y muchos enemigos por encontrar en las sombras de la ciudad.

     Dicen, o al menos así lo hacen en algún momento todos los defensores de este tipo de historias, que cuando el mundo está viviendo un mal momento, sea por el motivo que sea, las historias de superhéroes tienden a triunfar. Que la ficción da un héroe cuando la realidad lo necesita para salir del momento que le está tocando. Tal vez sea como eso de que en momentos de necesidad la gente compra más lotería... dichos que no son demostrables porque cada cual interpreta las cifras como mejor le conviene. Por eso os pregunto, a día de hoy... ¿pensáis que puede tener algo de cierto?

     Gracias

PD. "El héroe nocturno es un caballero de armadura ensangrentada. Está sucio, y hace todo lo que puede para negar que es un héroe todo el tiempo."
Frank Miller

miércoles, 21 de noviembre de 2012

La madre. Máximo Gorki





     "Cada mañana, entre el humo y el olor a aceite del barrio obrero, la sirena de la fábrica mugía y temblaba. Y de las casuchas grises salían apresuradamente, como cucarachas asustadas, gentes hoscas, con el cansancio todavía en los músculos. En el aire frío del amanecer, iban por las callejuelas sin pavimentar hacia la alta jaula de piedra que, serena e indiferente, los esperaba con sus innumerables ojos, cuadrados y viscosos. Se oía el chapoteo de los pasos en el fango. Las exclamaciones roncas de las voces dormidas se encontraban unas con otras: injurias soeces desgarraban el aire. Había también otros sonidos: el ruido sordo de las máquinas, el silbido del vapor. Sombrías y adustas, las altas chimeneas negras se perfilaban, dominando el barrio como gruesas columnas."

     Tengo una cierta tendencia a recaer en libros de corte amargo, que no hablan de felicidad y placidez sino que cuentan historias duras, de esas que forjan el carácter por obligación y dejan cicatrices en el alma. Ese tipo de historias. Por otro lado huyo de aquellas que contienen demasiadas consignas políticas, de forma directa o encubierta, no me gusta y me cuesta hacerme con ellas. Por eso de entrada dudaba ante este libro. Hasta que un día, no recuerdo en dónde leí: No conozco personaje más limpio que una madre, ni corazón con más capacidad de amar que el corazón de una madre. Hablaban de este libro, así que me decidí. Hoy traigo a mi estantería virtual, La madre.

     Conocemos  a Pelagia, una mujer rusa perteneciente a la clase obrera que vive bajo la férrea mano del marido y del régimen. Al enviudar su hijo empieza a sentir ansia por saber, ansia de revolución y a demostrarlo ante su madre. Ella no entiende esta necesidad, ha vivido de una forma y teme el cambio y las consecuencias que pueden tener y tienen buscarlo. Sin embargo es su hijo, y eso hace que se esfuerce y abra las puertas de su casa a este cambio mientras lucha por abrir también las puertas de su mente. A fin de cuentas, es su hijo.

     Alexei Maximovich Petrov, usó de seudónimo Máximo Gorki. Eso ya nos debería de dar una pista, Gorki significa amargo, y así es su texto. Al menos en esencia al tratar las desigualdades abismales de la sociedad. A través de un libro sencillo, un vocabulario igualmente sencillo y unos personajes apoyados en apenas unos pequeños trazos físicos entramos en esta historia que comienza con la sirena de una fábrica. Vamos conociendo a esta mujer, esta gran mujer que nos va ganando el terreno poco a poco a medida que avanzamos en la historia. Pero no sólo eso, sino que somos testigos de excepción de un momento crucial en la historia rusa, estamos viviendo  un cambio social que dará pie a una revolución, y lo hacemos a través de la experiencia y los ojos de Pelagia. Este libro, referente de la literatura rusa para crítica y lectores, nos aporta un testimonio de excepción. Asistimos a la vida gris de esta familia y al cambio, vemos al hijo leyendo, buscando su verdad hasta terminar contactando con revolucionarios y participar de su movimiento con el riesgo que ello entraña. Una época en la que este tipo de ideales terminaban, en el mejor de los casos, en el destierro. Y ahí es donde Pelagia es puesta a prueba, no lo entiende, no comprende esa lucha en la que su hijo se mete, pero es su hijo y tiene que apoyarlo de alguna manera. Poco a poco empieza a escucharlo mientras admite la revolución en su casa, y empieza a comprender que tal vez no sea tan malo buscar ese cambio.

     Por encima de la lucha, de la condena social, de las ideas revolucionarias, es un libro conmovedor. Un libro en el que una madre lucha por entender la actitud de su hijo, una mujer que empieza siendo una vieja de cuarenta años y a la que vemos crecer en un libro que resiste el paso de los años con firmeza. Se llega al final con interés en la historia de Pelagia, buscando saber la opción que tomará el autor, sólo vemos dos posibles y tenemos clara nuestra apuesta... y nos encontramos con un final espléndido que nos retumba en el cuerpo durante días, porque no es una historia sencilla. Ni bonita. Hoy traigo un clásico reciente con un claro mensaje social y político,  pero también con uno de los protagonistas que más interés han causado de la literatura rusa. Como sucede con estos libros ha sido tantas veces alabado como criticado, pero muchas veces esta diferencia de opiniones tan extrema hace que un título nos interese aún más.

     ¿No os sucede que los libros que provocan reacciones encontradas os atraen más que aquellos que son de aplauso unánime pero sin entusiasmo?

     Gracias

martes, 20 de noviembre de 2012

Cuento de Navidad. Charles Dickens




     "¡Oh! Pero Scrooge era atrozmente tacaño, avaro, cruel, desalmado, miserable, codicioso, incorregible, duro y esquinado como el pedernal, pero del cual ningún eslabón había arrancado nunca una chispa generosa; secreto y retraído y solitario como una ostra. El frío de su interior le helaba las viejas facciones, le amorataba la nariz afilada, le arrugaba las mejillas, le entorpecía la marcha, le enrojecía los ojos, le ponía azules los delgados labios; hablaba astutamente y con voz áspera. Fría escarcha cubría su cabeza y sus cejas y su barba de alambre. Siempre llevaba consigo su temperatura bajo cero; helaba su despacho en los días caniculares y no lo templaba ni un grado en Navidad."

    Dicen los centros comerciales que ya es Navidad. Hay lotería para estas fechas desde hace meses y empezamos a ver roscones y turrones, así como juguetes en todas las tiendas. El otro día entré en unos grandes almacenes y me sorprendí al escuchar villancicos por el hilo musical. Y no soy una especial entusiasta de dichas fiestas, lo que me lleva irremediablemente a sonreirme recordando al protagonista del libro que traigo hoy. Tras el villancico decidí que me apetecía comer un Roscón de Reyes. Ahora, en noviembre mejor que durante las fiestas, me sabe mejor. Y volví a recordar al mismo personaje... así que no me quedó más remedio que echar un ojo nuevamente al libro que traigo hoy a mi estantería virtual. Estaba segura de que, al igual que el dulce típico, lo iba a disfrutar más en estas fechas que cuando ya estuviera saturada de las fiestas. Por eso hoy traigo a mi estantería virtual, Cuento de Navidad.

     Conocemos a Ebenezar Scrooge, un anciano miserable, un avaro que no es capaz de ablandar su espíritu ni siquiera en Navidad. Un año es visitado por el espectro de su antiguo socio, fallecido, que le advierte del rumbo de su vida. Le visitarán tres espectros representando el pasado, presente y futuro en un intento de remover su conciencia para que cambie su mezquina condición.

     Scrooge es uno de los personajes más famosos de Dickens. Es el avaro de libro, el malo que todos tenemos en la mente cuando alguien se queja de la codicia y falta de escrúpulos ajenos. Y justo así aparece en este libro para que el lector empiece desde las primera páginas a marcar los defectos del protagonista. En apenas unas pocas palabras ya tenemos clasificado a este hombre de boca del autor y sentimiento propio por lo que se nos representa. Y así asistimos a la depuración de los sentimientos de Scrooge, a su proceso de cambio que no es otra cosa que un intento de que nos miremos a nosotros mismos buscando un poco de generosidad hacia los demás.

     Este cuento para niños y mayores, escrito hace más de un siglo, tuvo la intención de remover conciencias. Y lo consiguió de forma efectiva llevando a su protagonista hasta el extremo, casi caricaturesco de "lo que hay que corregir". Adaptado una y mil veces a la gran y pequeña pantalla, a los teatros escolares, cómics, dibujos animados... sigue haciendo las delicias de niños y mayores con su mensaje de generosidad y espíritu navideño. Y lo hace a través de una historia empañada de tristeza que busca un final feliz entre apariciones y momentos no exentos de comicidad. Porque sí, también nos hace reír con frases chispeantes. Es el encanto de Dickens, ese al que todos hemos sucumbido en alguna ocasión y el que hace que busque con cierta periodicidad un título suyo, leído o no. Encontramos además rasgos comunes, una cierta crítica a las injusticias que lo rodeaban y que en este caso se refleja en la búsqueda de la mejor calidad de vida para un niño. Para todos en realidad en una época en la que los niños pobres bien podían ser obreros o mendigos. Un mundo en el que el autor veía diferencias sociales que consideraba injustas y que se encargó de señalarnos en más de un título.

     Esta vez, antes de tiempo, os traigo un relato largo o novela corta que se hace llamar cuento. Porque la Navidad es un periodo de celebración en el que todo es posible. Y si no que se lo digan al pobre Scrooge.

     En mi caso, tengo que decir que no me siento en Navidad hasta que no veo Que bello es vivir y como el primer trozo de Roscón de Reyes. Y lo segundo ya lo hice. Y vosotros, ¿tenéis algún tipo de costumbre, por pequeña que sea, que se repita en estas fiestas?

     Gracias

PD. Me cae bien Scrooge.

lunes, 19 de noviembre de 2012

Cerdos y gallinas. Carlos Quilez



     "Miguel era confidente de Pumba. Miguel y Pumba eran informadores de la periodista Patricia Bucana desde hacía años. Nunca hasta el momento le habían fallado."

     Supongo que hoy pensaréis que voy a empezar contando que, cuando vi el título del libro, recordé la famosa película... y sí, es así. No se si ese era su objetivo pero la identificación fue inmediata, aunque luego el libro no tenga nada que ver; claro que siempre digo que cualquier motivo es bueno para acercarnos a una lectura. Y este fue el mío. Hoy traigo a mi estantería virtual, Cerdos y gallinas.

     Conocemos a Patricia Bucana, periodista en un diario de amplia tirada de Cataluña. Su trabajo consiste en dar la mejor información y destapar las noticias de actualidad, y lo hace ayudada por informadores que la llevarán a tener que cuidar tanto lo que habla como aquello que calla. Cuando un periodista llega a tocar determinados temas, también tiene que empezar a mirar a sus espaldas.

     Cuando abrí el libro, ya en sus primeras páginas, me di cuenta que no era una lectura común. Me encontré con un lenguaje directo que no buscaba embellecer, sino dar efecto a sus palabras. Cercano al denominado realismo sucio el autor nos cuenta los hechos de forma descarnada, metiéndose en la piel de la protagonista y utilizando un cuidado vocabulario acorde con los temas que nos presenta, nos introduce en un mundo corrupto. Estamos en las calles de ciudades españolas que bien podrían pertenecer a una obra de acción estadounidense con atracos a furgones, redadas, corrupciones y agresiones en prisión. Todo tiene cabida en este libro que no busca la simpatía del lector por sus personajes.

     Poco a poco nos va cerrando un círculo en el que se mezclan las distintas fuerzas de seguridad, las bandas organizadas, la prensa y el poder judicial dando a cada uno su lugar y trazando las finas líneas de unión entre ellos. No siempre lícitas ni legales y, por supuesto, no siempre bonitas. Sin embargo, poco a poco vamos interesándonos por ellos, la fuerza de la periodista de el Informador nos va ganando, la fortaleza que tiene que sacar ante los reveses propios de los mas bajos ambientes que existen en cualquier ciudad grande hace que sigamos con intereses sus pasos en este feo mundo. La acompañan sus confidentes de uno y otro lado que siembran las dudas unos de otros, y somos nosotros los que vamos perfilando, disipando dudas sobre quienes son los "buenos" de la historia. Nos acerca al trabajo de campo, la investigación y los intereses ocultos sin filigranas. Con un lenguaje cinematográfico en apenas unas líneas nos vemos en encuentros en bares de mala muerte, asistimos a operaciones policiales escondidos desde contenedores y tenemos reuniones clandestinas que no hacen ora cosa que despertar el interés del lector por el trabajo de la protagonista. Esta vez no trata de periodistas que investigan en microfilmes grandes secretos que los pueden hacer famosos, sino de aquellos que están en la calle para vivir las noticias que nos están contando en sus crónicas. Una novela que me ha sorprendido mucho, ruda, visceral y muy, muy real, apoyándose en un argot feo que hace resaltar el lugar del que proviene. Aunque se trate de ficción.

     Evidentemente no toda la novela de acción trata de asesinatos, hay robos, hay drogas y hay mil tipos de delitos que están en las calles y que suelen pasar desapercibidos en la literatura actual. Y, sobre todo, hay corrupción. Hoy propongo una lectura que toca justo ese tipo de temas. Casi como aquellas viejas series que comenzaban cuando el capitán de policía decía esa frase de... "Tengan cuidado ahí fuera". Me encantaba esa serie, ¿la recordáis?, si no es así seguro que se os ocurre algún ejemplo en la misma línea. Decidme, soy toda ojos.

     Gracias

PD. Esta es una de las novelas incluidas en el sorteo del pack novela negra. Si no os habéis apuntado aún, no tenéis más que pinchar aquí.

sábado, 17 de noviembre de 2012

Menú de lectura infantil: La cocina de los monstruos. Martín Piñol



 
     "Supongo que después de leer mi apasionante libro tendrás ganas de ser como yo. Eso siempre nos pasa a los triunfadores. Eso sí, no esperes convertirte en chef de la noche a la mañana. A mi me costó años, pero yo te ayudaré libro a libro, receta a receta, para que te conviertas en alguien tan excepcional como yo.
     Hoy te enseñaré a preparar macarrones zombiescos (que los humanos denoninan Macarrones a la boloñesa). Y si querías otro plato... pues te aguantas."

     Los niños de hoy son los lectores del mañana. Qué bonita frase, ¿verdad? Y qué cierta, dicho sea de paso. Así que cuando tenemos cerca un niño intentamos inculcarle nuestra pasión lectora. Ya si el niño es nuestro la historia se convierte en algo personal, contamos casi sus lecturas pensando en si le gustará o no leer. Y toca pensar en títulos. Los libros infantiles vistos por un adulto se podrían dividir en tres categorías (las mismas que para los adultos, lo comentaba ayer mismo en un blog, pero hoy no es el tema). Los libros que nos gustaría que leyeran, que suelen ser esas pequeñas joyas con magníficas ilustraciones que compramos para nosotros con la excusa del niño, los que consideramos que tienen que leer, es decir, esos títulos clásicos aceptados por todos como buenos pero que muchas veces ni hemos leído nosotros; y, finalmente, los libros que los niños quieren leer. Que son esos que leen con una sonrisa, les hacen incluso soltar alguna risotada y que en ocasiones llevan títulos que nos ponen, cuanto menos, nerviosos y usan apelativos de dudoso gusto para familias o aparecen monstruos un tanto peculiares.

     Sin embargo, si los adultos somos capaces de disfrutar y convertir en un éxito de ventas libros como Cincuenta sombras de Grey, el mismo derecho tienen los niños a disfrutar con sus lecturas aunque no vengan firmadas por Andersen. Hoy os hablaré de unos libros que pertenecen a este grupo. Se trata de La cocina de los monstruos.

     En estos libros conocemos a Bermúdez, un cocinero de un colegio que tiene mal carácter. Un día sirviendo una sopa en mal estado convierte a una parte de la población bastante considerable en zombis y, claro, él como buen cocinero también había probado la sopa. A partir de aquí comienzan las culinarias aventuras de este cocinero zombi con sus platos un tanto asquerosillos y su ayudante de cocina, una rata, para dar de comer a su nueva clientela. Por supuesto también hay niños normales, Pablo, Natalia y Zombete. Las aventuras están servidas.... bon apetit.

     Como podéis ver, no hay detectives avispados, ni amigos inseparables que resuelven robos en internados, ni princesas...y las ilustraciones os las podéis imaginar, ¿verdad? Pues esta colección de seis libros que comienza con macarrones y termina con helado hace que cada vez más niños que antes compraban refunfuñando, pidan el siguiente tomo a sus padres. A partir de ocho años, dicen, pero vale también para un poco antes... y para bastante después. Encontraremos monstruos, momias, brujas, yetis y vampiros entre otras criaturas, asistiremos a unas recetas un tanto repugnantes, adentraremos a los niños en las curiosidad por el mundo de la cocina de una forma un tanto divertida porque, evidentemente, ni los tallarines cuya receta nos ponen están hechos de momia, ni tenemos que salir a alta mar por un kraken para poder comer unos buenos calamares a la romana. Pero el lenguaje, las formas y la acción que tiene siempre la dosis justa de aventuras, hacen que estos libros sean perfectos para cualquier grumete aficionado a visitar tiendas de monstruos. Eso sí, de miedo nada, si acaso para morirse de risa.

     A fin de cuentas, si como comentaba al principio, los pequeños lectores de hoy, son los lectores del futuro, de lo que se trata es de encontrar títulos que les hagan divertirse. Porque los niños valoran mucho la capacidad de divertirlos que tengan cualquiera de las actividades que les proponemos y, a ciertas edades, hay incluso que tener cuidado no vayan a confundirlas, horror de los horrores, con algo educativo que pueda parecerles deberes (palabra tabú). Esta es, por lo tanto, mi propuesta para el comienzo a una lectura divertida y amena para niños. Y vosotros, ¿conocéis libros que podamos incluir en la carta a Sus Majestades los Reyes Magos de oriente de los mas pequeños de la casa?

     Gracias

viernes, 16 de noviembre de 2012

Balzac y la joven costurera china. Dai Sijie


     

     "El jefe del pueblo, un hombre de cincuenta años, estaba sentado con las piernas cruzadas en medio de la estancia, cerca del carbón que ardía en un hogar excavado en la propia tierra; inspeccionaba mi violín. En el equipaje de los dos muchachos de ciudad que éramos para él Luo y yo, era el único objeto del que parecía emanar cierto sabor extranjero, un olor a civilización capaz de despertar las sospechas de los aldeanos."

     Lo bueno de los medios cibernéticos es que nos permiten disfrutar con las lecturas de otros, descubrir sus impresiones y, muchas veces llevárnoslas para poder asumirlas como propias. Tras haber leído Seda, que percibí casi como un cuento, pensé que no encontraría más libros con esa etérea sensación de estar leyendo una fábula para adultos. Hasta que buceando por la red en bibliotecas ajenas, me encontré con el título que os traigo hoy. Hoy traigo a mi estantería virtual, Balzac y la joven costurera china.

     Conocemos a dos adolescentes chinos, Dai y Luo, que son enviados cerca de la frontera con el Tibet. Allí deberán de ser reeducados bajo el sistema de Mao Zedong a finales de los sesenta. Apenas tienen esperanzas de regresar y sus condiciones de vida dejan mucho que desear... hasta que descubren una maleta llena de las grandes obras de la literatura occidental. Encuentran un mundo que se abre con cada libro y unas oportunidades que se les brindan por leerlos, como por ejemplo, conquistar a la hija del sastre de un pueblo vecino.

     Este libro de corte autobiográfico roza la política en muchos momentos. Nos cuenta el proceso de desprogramación que pasó cuando Mao alcanzó el poder. En ese momento los hijos de librepensadores fueron enviados a reeducar al campo. Lo hace entre paisajes preciosos que están cargados muchas veces de importancia, como el paso del puente por el que los amigos sienten vértigo uno y terror el otro ante la posibilidad de caerse. Es inevitable ver el simbolismo escrito en cada página de este librito que dura apenas unas horas en manos de  un lector. Y es así porque trata del poder de la palabra, la importancia de los libros y la necesidad de saber. Tanto es así que asistimos a la transcripción de parte de un libro a un abrigo.

     Si tuviera que definir el libro en una sola palabra diría que es bonito. Un libro hermoso de leer en el que asistimos a ruralismos mezclados con historias de grandes clásicos de la literatura. Todo un deleite para el lector que avanza en esta historia en que sabemos a uno de los jóvenes enamorado de la costurera y que se apoyará en lecturas para conseguir su objetivo. Asistimos a un proceso que se produce cada vez que leemos un libro, un cambio apenas perceptible muchas veces, basado en la absorción de conceptos, vivencias , ideas... Tal vez, por ponerle una falta, sería el final. No el argumento, cuyo final me parece impecable, sino que la historia de repente avanza más deprisa impidiendo así que nos demoremos en la prosa. Porque es cierto que tiene un toque de fábula, dos jóvenes instruidos que se aburren y moldean a una jovencita.... tal vez la aman...y un libro que no se queda sólo en eso. Sino que tiene mucho más, y más libros en su interior. En definitiva un pequeño tesoro que también cuenta con su adaptación cinematográfica. Vuestra elección si no lo conocéis es decidir entre libro y película.
     A mi me gusta leer un libro cuya película ya he visto, así pongo la misma cara a los actores y no me llevo una decepción porque el director no ha sabido realizar la tarea imposible de poner la cara que yo veía al leer sobre los hombros del actor correspondiente. Y vosotros, si podéis elegir... ¿primero el libro o su adaptación cinematográfica?

     Gracias

     PD. Ha sido licencia mía poner de nombre Dai al narrador. Parto de la base de saber el nombre del autor y que el libro es autobiográfico.

jueves, 15 de noviembre de 2012

La vidente. Lars Kepler




     "Las alumnas están acostadas y el silencio reina en el Centro Birgitta. En la ventana de la oficina hay una lámpara encendida que hace que el mundo exterior parezca impenetrablemente oscuro.
    Elisabeth está sentada delante del ordenador con la frente fruncida mientras anota en el diario los sucesos que han ocurrido durante la noche.
     Faltan pocos minutos para las doce y Elisabeth cae en la cuenta de que ni siquiera le ha dado tiempo de tomarse la pastilla. Su pequeña droga, como ella suele bromear. Las guardias y las jornadas agotadoras han acabado por romperle el sueño. Suele tomarse diez miligramos de Stilnoct cada noche a las diez para poder quedarse dormida a las once y así tener unas cuantas horas de descanso."

     Esperaba la salida de este libro con bastantes ganas. Kepler es de esos autores que me ganó en su primera novela, al que busqué en la segunda y que ya me ha fidelizado en la tercera. Por eso hoy traigo a mi estantería virtual, La vidente.

     Una chica aparece muerta en un centro de adolescentes. No es el único cuerpo, muere también una encargada. Joona no podrá participar inicialmente más que como observador ya que está expedientado por asuntos internos, pero pronto se pone sobre la pista del caso. Tenemos además una vidente que afirma contactar con espíritus y tener datos claves para resolver el misterio, si es cierto lo que afirma, claro.

     Lars Kepler no existe como tal, es un seudónimo. Detrás se oculta un matrimonio sueco de escritores que intentaron mantener el anonimato durante la publicación de su primera novela. Sin embargo el éxito obtenido hizo que decidieran salir a la luz pública aunque, y esto se lo agradezco, han mantenido el nombre firmante en los libros.

     Lo primero que me ha sorprendido de estos libros es la dierencia con otros novelistas "del frío". Si de algo me quejé durante mi lectura de la archiconocida Trilogía Millenium es la incapacidad para sentir desasosiego, prisa. No era capaz de preocuparme por sus protagonistas porque el libro no me transmitía la sensación de acción. En este caso es justo lo contrario y el autor (pese que haya comentado que son dos personas me referiré a ellos como si realmente se tratara de Lars) consigue llevarme con rapidez por el libro. Llego sin aire al final de un capítulo y ya estoy deseando saber como va a continuar, algo imprescindible en este tipo de libros.
     Además sentí una creciente simpatía por su protagonista, Joona. Esta vez nuestro comisario es un hombre hermético casi para su vida privada, al menos hasta esta tercera parte en que nos permite asomarnos. Pero no intercalamos momentos privados con la acción que nos despisten pensando en mujeres desatendidas o hijos díscolos. Personalmente son detalles que a veces me desconcentran de la acción. Y este hombre me cayó bien desde el principio.  Y ni siquiera es sueco. Ademas, y como ya nos tiene acostumbrados, entre giros vertiginosos vamos descubriendo detalles locales, costumbres que nos son ajenas por tratarse de un país lejano. Un extra si me preguntáis a mí.

     Hoy traigo un libro de más de quinientas páginas que me leí en dos días porque es de esos que te mantienen pegado a sus letras hasta el final, sin importar la hora ni si hay que madrugar. De los que cada vez que dices, "cuando termine el siguiente capítulo lo dejo" consigue que pidas prórroga y que el reloj caiga en el olvido. En definitiva, un Thriller, con todas las consecuencias.

     Supongo que la pregunta que más podría dar para una buena charla sería si creemos en las videntes, pero me parece algo demasiado personal. Así que prefiero preguntaros por los libros que os mantuvieron pegados a sus páginas hasta que los terminásteis. A fin de cuentas y como dice George R. R. Martin "Winter is coming" y necesito sugerencias de títulos con los que quedarme en casa en los fríos días lluviosos.

     Gracias

     PD. Hoy os dejo el booktrailer


miércoles, 14 de noviembre de 2012

Papá Goriot. Honoré de Balzac




     "La señora Vauquer, des la familia de los Conflans, es una anciana que desde hace cuarenta años tiene en París una casa de huéspedes en la calle Nueva de Santa Genoveva, entre el Barrio Latino y el arrabal de San Marcelo. Esta casa de huéspedes, conocida con el nombre de la Casa Vauquer, admite lo mismo hombres que mujeres, jóvenes que viejos, sin que, a pesar de esto, jamás la maledicencia haya podido atacar las costumbres de este respetable establecimiento. Bien es cierto que desde hace treinta años no ha vivido en ella ninguna joven, y si viven algunos muchachos es, seguramente, porque sus familias les pasan pensiones muy exiguas. Sin embargo, en 1819, época en que comienza este drama, vi a una pobre chica."

     Una de las cosas que me gusta de la corriente clásica realista de la literatura, es que bien puedes leer una novela como si estuvieras mirando por una ventana. Tal vez sería mejor decir que mirando un televisor, puesto que no te muestra el presente sino el pasado. Pero las personas tenemos la mala costumbre de olvidar lo aprendido y recaer en algunos detalles. Hoy traigo una de las obras más conocidas de un autor perteneciente a esta corriente. Hoy traigo a mi estantería virtual, Papá Goriot.

     Conocemos a un inquilino de la casa de huéspedes Vauquer, Goriot. Parece un hombre pobre pero, según cuenta, sus hijas pertenecen a la nobleza. Vemos como el amor que las profesa el padre es correspondido con el desprecio de las hijas a la condición social de su progenitor, y asistimos a una comedia humana en la que la codicia prima en la sociedad.

     Lo primero que me sorprendió de este libro es que no tiene división en capítulos propiamente dicha. Había leído ya La piel de Zapa del autor, y tenía ganas de adentrarme en la pensión Vauquer. Una pensión llena de personajes inolvidables que contrasta duramente con el ambiente de la ciudad. La superficialidad en la que se mueven las hijas, los salones, los lujos, el status, contrasta terriblemente con la forma de ser del padre. No podemos evitar cuestionarnos las realidades que el autor nos plantea y que somos capaces de vislumbrar hoy en día en nuestra sociedad. Porque no es sólo la historia desgarradora del padre que da todo por sus hijas sin recibir nada más que desprecios. Una situación que se nos antoja desgarradora a medida que avanzamos. Goriot se va ganando nuestra simpatía con sus actos y sacrificios que él no siempre ve como tales, y acabamos salvando a Rastignac como único sincero en un mundo lleno de falsedades.
   
     Vemos también como Balzac va descubriéndose, alejándose de la imparcialidad del realismo para darnos sus pequeños juicios de valor, dirigiéndonos sin darnos cuenta en nuestro conocimiento de los personajes. La vida de este hombre, Goriot, la adoptamos como propia. Perdonamos los desmanes y seguimos su trayectoria esperando un reconocimiento. Conscientes de los errores cometidos en el complejo trabajo de la educación de las hijas y nos emocionamos con pequeñas escenas cargadas de emotividad. Incluso en algunos momentos nos desesperamos por intentar empujar las letras para que nos cuenten que sus personajes actúan de la forma que consideramos correcta. Porque sí, hasta ese punto me ganó el libro. Ví el mundo que me presentaba, las aspiraciones, las prioridades de cada uno de sus personajes y las analicé, compartí o discutí hasta la saciedad mientras avanzaba la historia buscando respuestas a mis dudas. Las obtenía, aunque no siempre fueran las que me hubieran gustado.... pero claro, la vida tiene la mala costumbre de no darnos siempre todo lo que nos gusta. Por eso hubo momentos en que me emocioné, porque no soy de amores sentimentales a la luz de la luna o las velas, sino de aquellos otros incondicionales. Como el que hoy traigo, fraternal. Historias que pasaron, que pueden ser reales tal y como nos advierte el autor, y que, precisamente por eso se antojan aún más interesantes.  Hoy os invito a asomaros a un mundo tangible, con descripciones precisas y diálogos frontales, un toque de crítica a ratos irónica y también, por qué no decirlo, momentos de ternura. Un libro con sentimientos tan fuertes como la paternidad.
     A mi no me cabe duda de una cosa, repetiré con el autor.

     Y vosotros, ¿con qué historias tenéis más feeling, con las románticas que hablan de parejas o con aquellas que nos hablan de sentimientos familiares o de amistad?

     Gracias

martes, 13 de noviembre de 2012

Philip Roth


Foto obtenida de Que Leer
     Tengo 78 años, ¿si escribir es tan frustrante y difícil para mí, qué me ha llevado a seguir haciéndolo? Y la respuesta es muy tonta, es que no sé cómo parar. Si pudiera dejar de escribir lo haría, pero no sé cómo hacerlo.
Philip Roth . La vanguardia

     Cuando encuentro  un autor que me gusta, me lanzo a su obra. Me gustan los clásicos, eso es un problema. Las obras se acaban y me quedo con la pena de no poder volver a recurrir a ese autor que tantos ratos ha compartido conmigo. Lo sustituyo por otro y vuelta a empezar. Eso no pasa con los vivos, escriben, continúan tejiendo historias que yo espero con la avidez de un peregrino en el desierto que se lanza sobre el agua para calmar su sed. Al menos un rato. Hasta la siguiente.

     Eso me pasaba con Roth. Y con Zuckerman. Aunque este último fuera sólo un personaje dedicado a escribir nacido de la mente de un autor. Roth reinventó su mundo dejando pistas para sus lectores y asomando a ellos a través de sus distintos personajes. Lo conocí de la mano de Portnoy y sus notas de psicoanálisis en las que rebelaba una profunda obsesión por su madre. Tal vez un obseso con una particular visión del mundo que reinventó el concepto de la provocación a través de sus vivencias de judío americano. El lamento de Portnoy reza el título con el que tomé contacto con el autor y del que salí desconcertada y me hizo aterrizar en la siguiente lectura. Así conocí Kepesh y seguí la senda de la obsesión y el deseo, acercándose al mundo de la literatura con él. Supongo que si esto fuera un examen de esos que exigen condensar un personaje a apenas unas pocas palabras diría que aprendí a ver la lujuria desde la madurez, la senectud y... porqué no, también desde el humor. Es imposible no recordar como en El Pecho se convertía en un pecho gigante. Todo es posible en la literatura, las metamorfosis se suceden en este campo desde hace años. Y acabé tropezando con Zuckerman. Zuckerman es el Roth literario, el que está dentro de sus libros. Se palpa el paralelismo de sus biografías, los sentimientos que despiertan en los lectores, los análisis que se desprenden de sus letras. Zuckerman toma vida y visita a Rushdie en La tierra bajo sus pies para dejar claro que puede existir en un mundo paralelo.Fue encadenado y desencadenado de mano de su padre literario, nos presentó su propia visión de América y, finalmente, lo vimos luchar contra su desaparición en Sale el espectro.

     Nos ha dejado Pastoral americana, Me casé con un comunista, Elegía... El animal moribundo... horas de lecturas extraordinarias, de esas que hay que leer y que no decepcionan una vez leídas. Hemos visto reinventarse la historia, revisado el "sueño americano", hemos pasado la polio y hemos visto a sus personajes caer.

     Dice Philip Roth que empezó a escribir llevado por la curiosidad. ¿Y si... hubiera pasado tal o cual cosa en lugar de lo que realmente sucedió?, ¿y si sucediera tal o cual cosa mañana? Yo también lo he leído por curiosidad. Cada vez. En cada libro mientras, a medida que me iba faltando menos para terminar ya hacía cábalas sobre el siguiente.

     Hace apenas unos días anunciaba su retirada del mundo de las letras. Uno de los grandes nombres de la literatura contemporánea, avalado por lectores, crítica y premios nos sorprendía al anunciar que dejaba de escribir dejándonos a muchos sin calendario que mirar esperando una nueva lectura. Por eso mi homenaje, para invitaros a conocer a Roth. Por su prosa, su sátira, su manejo de los personajes, porque hace reír y también pensar. Y porque, según mi opinión, es uno de los autores imprescindibles contemporáneos.

     He dedicado mi vida a la novela: he estudiado, he enseñado, he escrito y he leído. He dejado fuera casi todo lo demás. Ya basta. Ya no siento ese fanatismo por escribir que sentía antes.
Philip Roth  Les InRocks

     Y digo yo...
     Querido Roth,
     Parece que al final si encontraste la manera de dejar de escribir. Aunque... tal vez lo reconsideres, ¿verdad?

     Y vosotros, ¿habéis leído algo de Philip Roth?

     Gracias


lunes, 12 de noviembre de 2012

Sorteo de negro



     Dicen que la novela negra se fragua en el frío... yo se que no es así. Llevo mucha novela negra leída como para saber que eso es una moda. En unos meses, años tal vez, será en Francia, o en Alemania, tal vez venga del desierto. Son modas. Lo que permanece es la sensación de leer una buena novela negra en casa mientras vemos caer la lluvia a través del cristal.

     Hoy vengo con el sorteo de un lote de novela negra. Os invito a conocer a Atila, un detective marginal del barrio del Raval, en Barcelona. Y también  las subinspectoras Santana y Vázquez. Y, como no a Patricia, periodista, no pueden faltar los medios de comunicación.  Hay asesinatos, corrupción y mucho que investigar dentro de nuestras fronteras, por eso digo que no hace falta ir "al frío" para encontrarnos una buena novela.

     Estos son los libros:

     Atila, el detective marginal del Raval de Barcelona, está pasando una mala racha... Tiene problemas con la bebida y con Valentina, "lo más parecido a la mujer de su vida que hay en su vida". Una asociación de ayuda al inmigrante tiene grandes proyectos. El presidente del Fútbol Club Barcelona aspira a la Honorabilidad más absoluta por caminos azarosos. Un crimen machista tan claro de desconcierta al mismo Atila. Un par de jóvenes "señoras bien" decididas a portarse tan mal como les sea posible.



     Las subinspectoras Rebeca Santana y Miriam Vázquez se enfrentan a un violador y asesino en serie que actúa en la Costa Dorada y la ciudad de Barcelona. La sexta víctima del asesino es alguien del entorno más cercano de Santana. La complejidad del caso, sus implicaciones emocionales y la carrera desesperada por salvar a una persona querida no son los únicos obstáculos que deberá sortear la subinspectora. Conflictos sentimentales, un misterioso acosador y un giro inesperado en la complicada relación con su madre, acorralarán a Santana contra las cuerdas.



     La periodista Patricia Bucana (protagonista en otra novela del autor) se lanza a la apasionante misión de desentrañar la verdad en un mundo marrullero, confuso y podrido en el que nada es lo que parece ni nada es lo que debería ser. Sus averiguaciones y su implicación la empujan al precipicio, a las cloacas de la sociedad.





Los requisitos son muy fáciles:
1. Es obligatorio seguir el blog (+1)
2. Puesto que los tres son de la misma editorial, hacer "Me gusta" en su Facebook dará +1
3. La difusión también da +1, en cualquiera de sus formas. Con una entrada, el banner, diciéndoselo a la vecina... y lo hace de forma sumativa.
4. Sin formularios ni mails, un comentario con el nick y los enlaces a los puntos que tenéis.

     Es sencillo, ¿verdad?

     El sorteo es nacional, y el plazo finaliza el día 1 de diciembre. Fecha en que se dará el nombre del ganador.
     Mucha suerte a todos y muchas gracias por uniros al sorteo.


sábado, 10 de noviembre de 2012

Entrevista a Eva García Sáenz


     Eva García Sáenz nace en Vitoria, aunque se traslada a Alicante a los catorce años. Diplomada en Óptica y Optometría trabajó en el sector durante una década. Hoy trabaja en la Universidad de Alicante, además de impartir ponencias y cursos de redes sociales. Durante tres años se dedicó a escribir su primera novela, La saga de los Longevos, que ha cautivado a críticos y lectores. Hoy nos acercamos a conocerla un poco más.

     - Un éxito arrollador desde las redes hasta el papel, lo que muchos buscan hoy en día. ¿Cómo nace la historia de La saga de los Longevos?
     - El germen de la historia fue la intención de contar los conflictos de una misma familia, pero remontándome a la Prehistoria. Lo que tenía muy claro es que la ambientaría en Cantabria y en Santander: por el Monte Castillo, por las casa de indiano, por los acantilados... me pareció una ambientación muy literaria.
     -¿Cómo fueron sus primeros pasos en la red?, ¿y su paso al papel?
     - Lo primero que hice en la red fue diseñar la web, el blog, la fanpage de Facebook y la cuenta de Twitter oficiales de la novela, luego subí la novela a Amazon y la puse a disposición de los lectores. Realmente fueron ellos, con sus buenas críticas, los que hicieron que otros lectores compraran la novela en Amazon y llamara la atención de las editoriales. Poco después, las editoriales me pidieron el manuscrito y lo valoraron positivamente, así que la novela se publicó en papel en mayo en todas las librerías de España, siendo también un éxito. Y hasta hoy...
     - Lleva una ámplia documentación, ¿cuánto duró ese proceso aproximadamente?
     - El primer año dediqué cuatro horas diarias a la documentación, lo hacía por las noches, de 21.30 a 1.30, cuando terminaba mis obligaciones laborales y familiares. Después, cuando ya comencé la escritura en sí de la novela, tenía períodos en los que tenía que parar y continuar don la documentación. En cuanto al trabajo de campo, durante los tres veranos que duró el proceso de escritura de la novela, viajaba a Santander y a Cantabria y visitaba Museos, yacimientos y localizaciones.
     - No se si sabe que Santander es una ciudad que se vuelca en las historias que se quedan en su geografía. Libros como El último soldurio superaron en ventas a El código Da Vinci. Está sucediendo lo mismo con su obra, ¿se sintió así de acogida?
     - Me sentí muy acogida por los santanderinos, mejor no me pudieron tratar. A la presentación que hice en la Librería Gil, escenario real de la novela, acudió D. Íñigo de la Serna, el alcalde de Santander, y D. Pedro Ángel Fernández Vega, director del Museo de Prehistoria de Cantabria. Y no sólo eso, el aforo estaba lleno y acudieron muchos de los propietarios de restaurantes y locales que nombro en la novela. Fue muy emotivo.
     - Tengo que felicitarle por la elección de la portada, el Monumento al Incendio de Santander. ¿Cómo surgió esa portada?
     - Surgió a los pocos meses de estar escribiendo la novela, cuando ya tenía los personajes muy perfilados. Se dio la feliz circunstancia de que encontré una foto del monumento en una guía de Santander, y comprobé que todas las figuras humanas de la escultura podrían tener su equivalente en los personajes que había creado.
     - ¿Cómo has vivido este último año?, ¿se puede estar preparado para un éxito que llega tan de repente?
     - Este año está siendo una auténtica locura, en el buen sentido de la palabra. Lo que está ocurriendo con esta novela (buenas críticas, ediciones agotadas, traducción al inglés en Estados Unidos...) es lo mejor que puede pasarle a un autor, y estoy recopilando tantos momentos irrepetibles que me digo a mi misma que tengo el resto de mi vida para ir asumiéndolo. Por otro lado, la promoción está durando muchos meses, y eso es un reflejo del éxito que está teniendo la novela, tanto en las librerías como en su formato digital, pero es cierto que conjugar los viajes, presentaciones y eventos a los que me obliga la promoción con mis obligaciones laborales y familiares está resultando heroico. En unos meses voy a darme un tiempo de descanso.
     - Un ejemplo del cambio que está produciendo en el mundo literario la entrada de las nuevas tecnologías lo tenemos delante, pero ¿también cambia el lector, llega a más gente?
     - El lector sigue siendo el mismo, personas que amamos los libros y las buenas historias, aunque el formato sea diferente. Tampoco creo que esté llegando a más gente, lo que ocurre es que un porcentaje de esos lectores se van comprando un e-reader y comienzan a adquirir ebooks.
     - Me gustaría saber si en este momento está trabajando en alguna historia nueva, somos muchos los que esperamos la segunda obra de Eva.
     - Un poco más arriba he comentado el ritmo que supone promocionar una novela, de momento mi prioridad es concluir esa promoción y darme un descanso físico y mental
     - Y por último, ¿nos puede decir que está leyendo?
     - Estoy leyendo con mucho deleite "El cuarteto de Alejandría de Durrel. Voy por el primero tomo de la tetralogía, Justine, y me relaja mucho abrir el libro en cualquier página y disfrutar por disfrutar, sin importarme la trama.
     - Muchas gracias por su tiempo y amabilidad al responder a mis preguntas. Ha sido un auténtico placer.
     - El placer ha sido mío, un abrazo longevo.

     Se que me repito, pero si agradezco a los autores que deciden acercarse al blog, mucho mayor es mi agradecimiento a los lectores que venís cada día. Para mí es un placer compartir mis lecturas con todos vosotros.
     Gracias

viernes, 9 de noviembre de 2012

La saga de los longevos.La vieja familia. Eva García Sáenz




     "Me despertó la sensación angustiosa del agua raspando mis fosas nasales, colonizándome la boca e inundando la garganta, camino de los pulmones. El suelo blanco resbaló a mis pies, y me agarré desesperado a los bordes de la bañera para salir a la superficie.
     Aire.
     Por suerte el aire vino a salvarme y tosí como lo haría un anciano. Después me alcé y quedé de pie, desnudo, con el agua que por poco acaba conmigo chorreando por mi espalda."

     Hay libros que son la historia de un sueño. Este es uno de ellos. Su autora lo escribe, supongo que con el mismo cariño e ilusión que suponemos en cualquier proceso de creación, y lo autopublica en formato electrónico. El libro se convierte en un reguero de pólvora en las redes y las ventas suben, de modo que a los pocos meses lo tenemos editado en papel. Hoy traigo a mi estantería virtual el título causante de este salto, se trata de La saga de los longevos. La vieja familia.

     Adriana es una historiadora que regresa a Santander contratada por el Museo de Arqueología; pero no viene sólo a trabajar sino también marcada por el suicidio de su madre y dispuesta a rehacer su vida. En el museo se encuentra Iago del Castillo, que dirige una investigación genética que incluye a sus dos hermanos. Todos ellos de edades inusitadas. La relación entre ambos será crucial en esta historia.

     Lo cierto es que llevaba tiempo viendo este libro y, precisamente por verlo mucho, decidí esperar. Muchas veces prefiero dejar pasar un tiempo para no ir con una opinión preconcebida y, en este caso en particular, lo único que sabía era que La saga de los longevos no era una saga en sí, sino un único volumen autoconclusivo (salvo sorpresas que nos decida dar su autora).
     La trama me pareció original, eso de entrada. No hablamos de inmortales, sino de longevos. Personas que no envejecen y que tienen miles de años y están viviendo entre nosotros mientras se adaptan a los cambios. Y ahí la autora sobresale dando pequeños detalles, de esos en los que no piensas a no ser que te los pongan delante pero, una vez que te los explican, contribuyen a convertir una historia en una buena historia. Un ejemplo es el desgaste dental que puede tener una persona de determinada edad. Recuerdo que al leerlo no pude evitar sonreír pensando "Claro, es normal". Ese tipo de detalles. No nos encontramos esta vez seres paranormales cargados de poderes, sino personas que intentan llevar una vida normal en contra de la moda literaria de los últimos tiempos. Eso me gustó, captó mi interés puesto que ya podía tachar el camino habitual de estas historias.
     Protagonizada por Adriana y Iago, los acompañamos en sus vivencias mientras observamos como confluyen de forma irremediable sin temer que el libro se convierta en una simple historia romántica. Porque tampoco es eso. En realidad, Eva nos ofrece un libro que se lee con rapidez, en el que buscamos el motivo, el gen que determina que unas personas sean longevos y otras no. Buscamos también la causa de la muerte de la madre de la protagonista y asistimos a las tiranteces familiares de los protagonistas. Si tuviera que poner una etiqueta al libro diría que es una historia familiar con todas las pequeñas ramificaciones que eso implica. Una historia de las que gusta leer, que nos atrapa curiosos entre sus páginas para proporcionarnos horas de entretenimiento y que, llegado el final... nos obliga a hacer cábalas sobre una posible segunda parte. A mi modo de ver, queda mucho que contar sobre los longevos. Es más, tengo dos o tres teorías al respecto que no os voy a desvelar.

     Esta vez han sido los inmortales los que han sido reinventados consiguiendo sorprender al lector. Qué pensáis vosotros, ¿ya está todo inventado en la literatura o aún nos quedan sorpresas que ir descubriendo?
 
     Gracias

     PD: Hoy sí, el booktrailer. Y no dejéis de fijaros en la portada, uno de mis monumentos favoritos.


jueves, 8 de noviembre de 2012

Puerto humano. John Ajvide Lindqvist




     "Bienvenido a la isla de Domarö.
     Este es un lugar que no podrás encontrar en ninguna carta de navegación, a menos que pongas mucha atención. Se encuentra a algo más de dos millas al este del istmo de Refsnäs, en el sur del archipiélago de Roslagen, en el interior del mismo, alejado de los fatos de Söderarm y Tjärven."

     Parece que cuando hablamos de terror tenemos que pensar en mónstruos de pesadilla que acechan bajo la cama, y parece que tenemos que pensar siempre en los mismos autores. Sin embargo, hace unos años que empiezan a entrar con fuerza nombres nuevos como es el del autor que hoy traigo, que desembarcó con sus peculiares historias de niños, vampiros y asesinatos. Hoy acerco su último libro a mi estantería virtual, una historia que le ha consagrado en el panorama literario actual. Se trata de Puerto humano.

     Anders está con su mujer y su hija en la isla de Domaro, un paraíso de hielo en miniatura con un emblemático faro. Un día van de excursion al faro y su hija se adentra en una planicie de nieve desapareciendo en la nada sin dejar rastro destrozando al matrimonio y convirtiendo a Anders en un hombre atormentado que busca una solución en el resente mirando al pasado de una isla en la que no es todo tan sencillo como parece.

     Como he comenzado diciendo, el terror no viene siempre de la mano de mónstruos. En este caso y pese a todo lo que nos va añadiendo el autor, no podemos desembarazarnos de él desde el momento de la desaparición de la niña. Asistimos a un padre destrozado que cae en las garras del alcohol tras esa devastadora desaparición. Cuando toca fondo, su única salida es volver al lugar en el que todo pasó con la esperanza de poder encontrar un clavo al que agarrarse y salvarse, ya no tiene esperanzas de salvar a su desaparecida hija. Hace demasiado tiempo. Nos vemos inmersos una historia cargada de melancolía y secretismos con el mar de fondo y como protagonista. Vamos conociendo a los habitantes de esa pequeña isla y nos sumergimos en una atmósfera opresiva que se va enrareciendo con palabras a media voz y secretos jamás compartidos. Porque no es sólo la historia de una desaparición, sino la de una isla completa con sus habitantes y costumbres. Tenemos la sensación de estar ante esa portada blanca y ver como se difumina una niebla que nos va permitiendo ser testigos de cuanto nos relata el autor.

     Al mas puro estilo de los "lugares malditos" y cargados de leyenda, acompañamos al protagonista pensando en lo que acontecerá al caer el sol, sabiendo que los verdaderos mónstruos no necesitan ocultarse en las sombras. Lo acompañaremos mientras recuerda, piensa en cosas que le pasaron desapercibidas en su momento, intentando agarrarse a partes iguales a sus recuerdos aún vivos y a la posibilidad de que exista algo tras la muerte que le permita mantener una conexión con su hija... y con la realidad. Es, en definitiva, una historia en la que un hombre lucha por su cordura y su vida mientras se sumerge en las aguas de las leyendas locales de mano de una pareja de ancianos. Cada pueblo tiene su historia maldita, cada casa, cada lugar... si estamos además en una isla de pescadores, prácticamente aislada.. cualquier cosa es posible. Incluso que Maja, la hija de Anders, esté aún luchando por escapar de su oscuro cautiverio.

     Hoy traigo una novela que me llamó la atención de un autor con una visión propia del terror contemporáneo. Alabado por la crítica y los lectores nos descubre a personajes cercanos con los que nos es fácil conectar. No hay mónstruos bajo la cama esta vez... o tal vez sí, porque el autor fiel a su costumbre nos hará girar 180º a medida que vayamos leyendo. Pero los peores son, sin lugar a dudas, aquellos que nos van comiendo por dentro y nos hacen descender a los infiernos, porque los infiernos particulares siempre han sido mucho más peligrosos que los que apareen en grabados. Sean del tipo que sean.

     Una historia de pérdidas irreemplazables y de secretos. Porque, digo yo, ¿no os resulta irresistible desde niños el poder descubrir un secreto?

     Gracias

   

miércoles, 7 de noviembre de 2012

El juego de las tres cartas. Marco Malvaldi




     "Si ese era todo el caos, entonces Italia debía de ser el país más hermoso del mundo. Eso pensaba Koichi Kawaguchi apenas hubo bajado del vuelo JL3476, que lo había recibido en el aeropuerto de Narita y lo había hecho aterrizar, entre incomprensibles aplausos de los italianos presentes en el avión, en una de las pistas de Roma Fiumicino."

     Me gusta variar en las lecturas. Como a todos supongo. No hablo ya de clásicos o recién horneados, sino de las temáticas. Y hay alguna que me cuesta un poco más encontrar. Una de ellas sería la que roza el humor por eso es muy grato encontrar libros que nos hagan partícipes de su historia con una sonrisa en la boca. Hace unos días me topé con uno que venía precedido de éxito en el país natal del autor y que, de algún modo, me resultó atractivo por el tema que trataba. Hoy traigo a mi estantería virtual, El juego de las tres cartas.

     Estamos en Pineta, un lugar tal vez no demasiado grande, o moderno. Allí tiene lugar un importante congreso lleno de Físicos y Matemáticos y, es justo en este entorno, que uno de los congresistas más famosos, muere de una forma sospechosa. La policía acudirá entonces al dueño del BarLume, encargado del catering.

     Cuando abrí el libro y comencé a leer el viaje de un congresista y las miradas furtivas a los jóvenes cargados con pósters, el autor se ganó mi simpatía. No porque lo recordara o no, sino porque la descripción era tan certera y cercana, que parecía que estuviera yo sentada en una de las filas de espera del aeropuerto. Lo acompañé hasta el nombrado bar para conocer a su dueño y a esos clientes fijos que nos encontramos en este tipo de establecimientos. En este caso un grupo de jubilados que tienen por costumbre ir a diario, a la misma mesa, a jugar la partida mientras hablan de sus cosas. Conocidos todos descubrí el cuerpo no sin sorpresa y empezó la verdadera historia.

     Porque hoy traigo un librito de apenas doscientas páginas concebido para entretener al lector. Lleno de descripciones sencillas y narrado de forma cercana, consigue que veamos los ambientes y personajes que pueblan este lugar. Nos descubrimos sonrientes, no de forma esporádica, sino casi en cada página, con las ocurrencias de cada uno y el marcado carácter conque se nos representan. Supongo que, sin tener mucho que ver, me recordó los tiempos en que leía novelas de misterio juveniles. No porque el libro en sí lo sea, sino porque consigue ese punto de complicidad y fluidez que tenían aquellos libros y que provocaban que las tardes se consumieran sin apenas darme cuenta.

     Hoy traigo un libro divertido, con cadáver incluído, para pasar las tardes de invierno haciendo uso de la literatura del puro entretenimiento. No se trata tanto de descubrir al asesino como disfrutar del camino, que también es importante, y de no perder la vista la mesa que está a la sombra del árbol.

     Y vosotros, ¿qué os ha hecho reir últimamente?

     Gracias